Se empañan los vidrios,
recuerdo la niñez
un soplo al cristal y
escribo con los dedos
mi nombre inmortalizado
pronto se borrará.
Regreso la vista a mi
libro
suspiro y viajo hacia
lejanías
mi atención vuelve al
paisaje.
Inmutable contemplo las
posibles reliquias
afloran en mi mente
historias de ese pasaje fugaz
inmensa ciudad de
soledades.
Transcurre en ti la vida
o la perdición
incontables rostros
despojados de miradas
apretados y acelerados
pasos.
Despiadadas normalidades
implacables modalidades
reflejos de egoísmo e
inequidad.
Impunes la orden del
reloj y el curro de los billetes
se empañan los vidrios,
recuerdo la niñez
un soplo al cristal y
escribo con los dedos.
Mi nombre inmortalizado
pronto se borrará.
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